Paroxysmal nonepileptic events in children with epilepsy
¿Por qué leer?
La epilepsia es una de las enfermedades neurológicas más prevalentes en el mundo y los trastornos paroxísticos no epilépticos (TPNE) aunque poco frecuentes, son particularmente difíciles de diagnosticar en el paciente con epilepsia. El objetivo de este artículo fue determinar las características de los TPNE en pacientes en quienes se sospechaba que se traba de crisis epilépticas por los familiares de niños con diagnóstico de epilepsia e incluso por sus médicos.
¿Qué hicieron?
Se revisaron los video-electroencefalogramas (vEEG) de los eventos paroxísticos que presentaban habitualmente niños con epilepsia del Hospital Universitario de Nagoya entre octubre del 2006 y enero del 2016, revisando un total de 886 eventos paroxísticos en 68 niños; los TPNE se dividían por sospecha clínica en dos grupos, los que se creía podrían ser crisis epilépticas y los que se sospechaba eran TPNE. El vEEG confirmó que 83 eventos en 68 niños eran TPNE. La edad media fue de 3.2 años y los diagnósticos basales incluían epilepsias focales, espasmos infantiles y otros tipos de epilepsias. El tipo más frecuente de TPNE fueron las mioclonías del sueño en 11 niños, seguido de estereotipias en 9, mioclonías en vigilia en 8, desviaciones oculares paroxísticas (DOP) en 8. Cuando se revisaban nuevamente los videos, los médicos continuaban sospechando que se tratara de crisis epilépticas en 3 de los pacientes con DOP y en 2 de los niños que presentaban posturas tónicas. Las mioclonías, estereotipias y caídas de la cabeza se diagnosticaban de forma frecuente y errónea como espasmos epilépticos; la mirada fija y arresto de actividad durante somnolencia se confundían frecuentemente con crisis focales discognitivas. Siete de los 8 pacientes con DOP tenían espasmos epilépticos concurrentes con crisis epilépticas y además tenían lesiones cerebrales difusas o disminución de la agudeza visual.
¿Qué aporta?
Además de que señalan los TPNE más frecuentes concomitantes con el diagnóstico de epilepsia, remarcan la importancia del vEEG para el diagnóstico adecuado de los pacientes con movimientos paroxísticos anormales ya que clínicamente puede ser muy difícil diferenciarlos; además de aportar evidencia para que los DOP sean un diagnóstico diferencial a considerar en pacientes con eventos oculomotores paroxísticos.
Ito Y, Kidokoro H, Negoro T, et al. Paroxysmal nonepileptic events in children with epilepsy. Epilepsy Research 132 (2017): 59-63. doi: http://dx.doi.org/10.1016/j.eplepsyres.2017.02.009.
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